Según nuestro socio, en la propuesta de nueva Constitución, los impuestos sacrifican la eficiencia para alcanzar objetivos específicos de política económica, dejando de ser una herramienta de promoción. Asimismo, asegura que se basa en conceptos que carecen de fundamento doctrinal o jurisprudencial, lo que crea un amplio margen de discreción interpretativa que generará incertidumbre durante al menos algunos años.
